OZARK, DECISIONES QUE CAMBIAN VIDAS
#series #cine #Netflix
16/09/2020
Hay cientos de series, miles pero cautivar al espectador requiere ingenio, método, esa habilidad que te permita mantenerte expectante frente a la pantalla esperando el próximo giro de los acontecimientos, un desenlace inesperado, un golpe preciso en la retina.
Posiblemente Ozark, tras la ya vista hace años Breaking Bad, sea la serie televisiva que más me ha gustado en apenas tres temporadas, 30 capÃtulos de aproximadamente una hora.
Contiene esos elementos fundamentales: el suspense, el rigor argumental y una carga emocional en sus personajes que hace posible que los minutos pasen rápidos y te enganches al próximo capÃtulo esperando ese impacto.
Las relaciones son complicadas, más aún si una familia de clase media americana se ve envuelta en la trama con un cártel de la droga mejicano, sus enemigos y las sucesivas ramificaciones que va tomando la historia hasta convertirla en un cocktail de profundas y serias amenazas en todas direcciones. Las decisiones cambian nuestras vidas, implica consecuencias y lo que, a priori, puede parecer bajo control luego se convierte en un disparate escalonado que va minando tu vida de forma consciente o inconsciente.
Lo que se conoce como efecto dominó puede estar controlado, sistemáticamente organizado con precisión y por ende tener acontecimientos similares pero, cuando la variable está sujeta a las emociones humanas, sus reacciones, el perfil de los personajes, el efecto se convierte en un carrusel sorpresivo de acciones lo que provoca constantemente nuevos escenarios donde adentrase con lupa, con interés.
Esa es la clave: dibujar personajes con tintes variados y ser capaz de entrelazarlos con maestrÃa, combinando una ranchera maquiavélica con la inteligencia de Marty, su perfeccionado sistema para blanquear dinero, la determinación de su mujer, Wendy o el sociópata de su hermano, un tipo que puede arruinarte la vida por su bipolaridad.
Y esto es sólamente un breve reflejo de lo que ofrece Ozark ya que sus personajes responden a múltiples perfiles concatenados desde la ambición, la falta de oportunidades, la carencia de escrúpulos, el ideario fantasmal de sus adolescentes, las réplicas de la ley y esos turbios fangos que entraña siempre las cotas de poder.
Nada está bajo control.
Una decisión puede cambiar tu vida y la de las personas que amas pero, a veces, no hay más remedio que seguir adelante cuando la mierda, con perdón, te llega hasta el cuello.
Os animo pues a verla en Netflix.
Cada personaje es una cascada emocional con un futuro incierto. Casi nada se puede prever en esta serie que, aún siendo violenta, no se identifica por ese tipo de escenas ( ya saben ese desbordamiento de sangre sin ton ni son). Es una serie inteligente, bien trabajada en sus tiempos, con brotes sarcásticos donde te juegas la vida a cada segundo.
Pero, sobre todo, son ellos, sus personajes: Ruth, Petty, Helen, Buddy.....